El sol y la luna se fundieron sin miedo en tus ojos y para encender a esos ojos el pecado es el que mas te ayuda, le agradezco a mi santo el de los que no se creen ninguna por haberme engañado otra vez y dejarme a tus pies como un ciego que busca y encuentra después de perderse hasta enloquecer…

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domingo, 3 de noviembre de 2013

Vivos recuerdos.

Tu respiración iba lentamente aumentando hacia un espacio sin fin, la recuerdo como si fuera mi propia respiración, la que estoy sintiendo ahora, tratando de que se funda con el recuerdo, para mantenerla viva, ya quizás no se si volverá a estar. 
Tampoco puedo escribirte, no quiero largarte. Quiero que permanezcas en mi mente, en mis pensamientos, imaginación.
Algún día, quizás, el recuerdo se termine.